La odontología ha cambiado drásticamente en las últimas décadas. Cada vez existe una mayor demanda de una odontología mínimamente invasiva, que intente analizar el porqué de la enfermedad y no sólo limitarse a solucionar el problema inmediato. La odontología para bebés se encuentra en la base de este cambio, en el cual el odontopediatra tiene la oportunidad de analizar y controlar los factores de riesgo de la enfermedad antes de que ésta aparezca.